Hemos cumplido 20 años al servicio de Dios, recordamos las memorias del ayer y mantenemos viva la esperanza del mañana porque Cristo ha hecho su obra en nosotros.
Encaminamos nuestros sueños con el conocimiento biblico, la sabiduria y discernimiento dados por Dios y avanzamos hacia una vida cada día más transformada y perfectible en Cristo.


































































